Semana de la moda en París

domingo, 28 de marzo de 2010 | |


PARÍS — Las amazonas dominaron la romántica colección de 'prêt-a-porter' de la casa Christian Dior para la temporada otoño-invierno 2010-2011, presentada el viernes en la Semana de la Moda de París, mientras que el desfile del creador japonés Issey Miyake se inspiró en las matemáticas.
La colección diseñada para Dior por el extravagante John Galliano, que ya había vestido a sus modelos de amazonas en los pasados desfiles de alta costura, en enero en París, propuso trajes de equitación en tejidos de 'tweed', pantalones 'jodhpur' y boinas en piel de ante o en cuero.
Pero el diseñador británico nacido en Gibraltar mostró también su lado poético y romántico, ofreciendo vaporosos vestidos en muselina y encajes, finos y transparentes.
"Quería crear un lujo nuevo", explicó Galliano, que dijo que se había inspirado en el siglo XVIII para aspectos de esta colección, principalmente para sus telas estampadas y las medias de lana, cálidas pero sexy, con las que vistió a sus modelos.
La inspiración del diseñador japonés Issey Miyake para la colección que presentó el viernes en uno de los salones del Carrusel del Museo del Louvre fueron las teorías geométricas del matemático estadounidense William Thurston, que lo inspiraron a diseñar prendas geométricas.
Abrigos en organza negra, elaborados con cuadriculados bordados con pequeñas estrellas, captando la luz alrededor de la silueta; abrigos con enormes bolsas que ocultan unas más pequeñas y que, según el modista, "pueden contener todo el universo": la colección del creador japonés fue geométrica y abstracta, pero siempre elegante.
Junto a las celebridades, periodistas de moda y compradores que llenaron la sala, había prestigiosos científicos, que expresaron luego su asombro ante el sorprendente desfile y el 'glamour' del mundo de la moda. Al final del desfile, Thurston saluó con el diseñador de la casa Issey Miyake, Dai Fujiwara.
La pasarela de la estilista londinense Vivienne Westwood, que viste tanto a estrellas de cine como a miembros de la realeza británica, fue femenina y romántica, pero con colores vibrantes y toques muy teatrales, capaces de calentar cualquier invierno, por más frío que sea.
Vestidos en sedosos rasos y tafetanes, en colores intensos -morado oscuro, rosa, naranja - o fabricados en suaves tules llenos de flores, acompañados de calcetas rayadas, lazos de colores y de grandes chales gitanos: la irreverente gran dama de la moda británica, ya con 68 años, mostró una colección 'chic', urbana y juvenil.
El último desfile del viernes fue el del japonés Yohji Yamamoto, que aprovechó las vacaciones escolares para presentar el desfile en un histórico instituto de París.
Su pasarela, que se declinó en sólo tres colores -negro, azul y blanco-, fue minimalista, de líneas puras, y austera, como los tiempos que corren.
Abrigos negros, en lanas suaves, cortos por delante y que caían atrás en diferentes largos, faldas negras plisadas, pantalones bajo chaquetas cortas, que dejaban ver el ombligo, conjuntos que parecían perfectos para escolares un poco atrevidas, y algunos trajes blancos, en forma de túnicas, que evocaban a los samurái.
Toda la colección reflejaba el maestro del corte que es este diseñador japonés, que vistió a sus modelos con ropa cómoda, caliente y versátil, cada una de ellas perfectamente construida.

0 comentarios:

Publicar un comentario